MUJER EJEMPLAR.
Guerreras invencibles, incansables y hermosas. Princesas valientes que preceden de reinas gloriosas, que despiertan al alba y embellecen los dias marcando la diferencia con su sonrisa perfecta y su sabia mirada que esconde a fuerza de una voluntad inquebrantable sus nostalgias.
Grietas en sus manos, surcos en su cara, cicatrices de antaño en sus almas que por amor han amordazado con los años para aplaudir otros èxitos que las llenan de más alegrías y esperanzas que los propios con los que se han quedado...
Es por el misterio del encanto de su presencia la belleza de las rosas,
es por su palabra siempre fresca, precisa y oportuna por quien finalizan las guerras y brillan las estrellas.
Es de vocación y por profesión MUJER en el amplio y maravilloso significado de la palabra.
Titulo divino que porta con serenidad y con humildad ignorando a conciencia la grandeza inexorable de tal estampa.
Mano derecha de Dios, extención de su amor sobre la tierra. Capáz de pelear batallas propias y ajenas con la corona de reina bien puesta, de levantar la voz para defender nobles causas y extraordinarias ideas.
Capáz de curar con sus besos las heridas mas profundas que la vida nos deja, y de renunciar sin apego ni remordimiento a sus anhelos más grandes para organizar vidas, naciones, universos y loncheras con su sonrisa perfecta, con los pies cansados y todo ésto antes de que amanezca...
Bendita seas!
Sendy Sámano
Marzo 8 2014
Guerreras invencibles, incansables y hermosas. Princesas valientes que preceden de reinas gloriosas, que despiertan al alba y embellecen los dias marcando la diferencia con su sonrisa perfecta y su sabia mirada que esconde a fuerza de una voluntad inquebrantable sus nostalgias.
Grietas en sus manos, surcos en su cara, cicatrices de antaño en sus almas que por amor han amordazado con los años para aplaudir otros èxitos que las llenan de más alegrías y esperanzas que los propios con los que se han quedado...
Es por el misterio del encanto de su presencia la belleza de las rosas,
es por su palabra siempre fresca, precisa y oportuna por quien finalizan las guerras y brillan las estrellas.
Es de vocación y por profesión MUJER en el amplio y maravilloso significado de la palabra.
Titulo divino que porta con serenidad y con humildad ignorando a conciencia la grandeza inexorable de tal estampa.
Mano derecha de Dios, extención de su amor sobre la tierra. Capáz de pelear batallas propias y ajenas con la corona de reina bien puesta, de levantar la voz para defender nobles causas y extraordinarias ideas.
Capáz de curar con sus besos las heridas mas profundas que la vida nos deja, y de renunciar sin apego ni remordimiento a sus anhelos más grandes para organizar vidas, naciones, universos y loncheras con su sonrisa perfecta, con los pies cansados y todo ésto antes de que amanezca...
Bendita seas!
Sendy Sámano
Marzo 8 2014
