El altruismo es procurar el bien de
los demás por el simple hecho de ayudar, es una expresión de lo más
humana y noble que enriquece el espíritu y trae satisfacciones como
ninguna otra.
Ojalá en alguna ocasión hayas reparado
en que no hay sensación más placentera que ayudar a las personas, y más
si lo haces de manera desinteresada. Desprenderte de lo que tienes para
otorgárselo a alguien a quien le va a hacer de mucha ayuda, de eso se
trata el altruismo, de valorar el hecho de que siempre es mejor dar que
recibir.
Ser altruista no significa dar lo que te
sobra, sino ser consciente de que, aunque poseas mucho o poco, debes
tener siempre una actitud de otorgar ayuda a quien la necesita. El
altruismo no es darle una caridad a un limosnero por el simple hecho de
sentir que harás un bien, sino ayudar a ese limosnero a que cambie su
vida. Es poner en práctica el antiguo proverbio que dice que si le das
un pescado a alguien, comerá ese día, pero si le enseñas a pescar, va a
comer toda su vida.
Y es que el sentido de ayuda es una
conducta que está arraigada primitivamente en los humanos. Se ha
comprobado que la idea de ayudar a los demás se adquiere en el individuo
apenas a los 18 meses de vida; incluso, se ha observado que en la
naturaleza hay especies que tienen la fuerte conducta de sacrificar su
propia vida en pro de la de sus semejantes. Si desde nuestros inicios
llevamos tatuada en nuestros genes esta práctica, ¿por qué la
transformamos con los años en un egoísmo que a nadie beneficia?
Si en tu espíritu nace la voluntad de
ayudar, no es necesario que ofrezcas dinero o bienes materiales a los
necesitados, tu apoyo moral puede ser igual o más valioso. Acércate a
una causa que requiera de voluntariado, una institución de salud, un
asilo o un refugio; fomenta y practica la adopción y el cero maltrato a
los animales, ofrece un recurso que es más precioso que muchos otros: tu
tiempo, y regocíjate en la incomparable satisfacción de ayudar.
Recuerda que cuando adoptes una valiosa
sensibilidad de ayudar a manos llenas, el sentido más auténtico del
altruismo es el anonimato.